Mantener un equipo comprometido es un desafío. La presión y el estrés son factores que empeoran el desempeño profesional.
A pesar de las dificultades, algunas técnicas pueden ayudar a los líderes a mantener activo a su equipo, la metodología GTD®, por ejemplo, puede ser una de ellas. La organización y el enfoque pueden transformar el entorno de trabajo ya sea físico o virtual. |
Mantener un buen ambiente de trabajo es fundamental, tanto en el ámbito físico como en el aspecto emocional. Un equipo motivado aporta más y consigue mejores resultados. Algunas técnicas, como GTD® y Pomodoro, pueden ayudarte a aumentar la productividad de tu equipo y pueden usarse juntas.
Con ellos aprendemos a administrar nuestro tiempo y nuestras demandas, evitando sobrecargas y estrés. La metodología GTD®, en particular, también nos muestra cómo establecer prioridades y tener una mente más centrada.
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